sexta-feira, abril 04, 2014

Memória do ISSSL : A Celeuma do Palácio Flor da Murta



O tempo em que se inicia a decadência do ISSSL CRL.e do ISSS de Beja, contrastando com todo o avanço académico e científico, foi profundamente marcado pelos sonhos mirabolantes das suas direcções.
Como não possuía instalações próprias para as suas diferentes actividades ( o palacete do Largo do Mitelo era alugado) decidiram comprar palacetes e restaurar para o ensino de graduação,pós e  formação permanente ou contínua. Dos dois palacetes adquiridos em Lisboa, o único que chegou a funcionar foi uma propriedade com a qual ficou o advogado da cooperativa. O outro, Flor da Murta, foi vendido a uma empresa ( sonae ?) que aproveitou o restauro inicial, começado pelo ISSSL. Ainda compraram mais terrenos para construção em Lisboa e Beja. 
Ao longo de anos os docentes e os funcionários mais ingénuos sonhavam com a maqueta acima apresentada e fotografada por mim 

Afredo Henríquez







".... A origem deste palácio tem por base uma casa nobre quinhentista, progressivamente reedificada ao longo dos séculos XVII e XVIII, nas mãos da família dos Meneses, senhores da Flor da Murta, facto que lhe imprimiu a sua feição actual, barroca. Apesar de pouco afectado pelo terramoto de 1755, o edifício acabou por cair em ruína. Alvo de uma intervenção recente de reconstrução de todo o interior, actualmente mantém apenas a fachada original, à qual foi acrescentado um piso superior. Já no século XX foi desafectada a capela, da invocação de Nossa Senhora de Monserrate, da qual resta o portal encimado por frontão triangular e cruz, na fachada lateral e, mais tarde, foram também removidos alguns painéis de azulejos." in CM Lisboa
Rua de São Bento, 2-4; Rua Poço dos Negros, 150; Rua Fresca, 15
Lisboa 

Finalistas De Serviço Social ISS 1957


segunda-feira, março 31, 2014

Memória Social: Exposição sobre Falange Española/Serviço Social artigo de TEREIXA CONSTENLA

Con un pequeño gemido, basta

En el sexo, el trabajo y la familia, la Sección Femenina de la Falange trató de cercenar la libertad de la mujer - Una exposición revive el adoctrinamiento La mujer ideal de Pilar Primo de Rivera


Lo más impactante que se pueda decir sobre la Sección Femenina lo dijo la Sección Femenina. "Si tu marido te pide prácticas sexuales inusuales, sé obediente y no te quejes". "Si él siente la necesidad de dormir, no le presiones o estimules la intimidad". "Si sugiere la unión, accede humildemente, teniendo siempre en cuenta que su satisfacción es más importante que la de una mujer. Cuando alcance el momento culminante, un pequeño gemido por tu parte es suficiente para indicar cualquier goce que haya podido experimentar". Entre 1934 y 1977, la Sección Femenina de la Falange adoctrinó a las españolas para cercenarles cualquier deseo de emancipación o rebeldía y cualquier otro deseo (sobre todo ése). Tras el paréntesis liberador de la Segunda República, en el que las mujeres habían conquistado el derecho a votar y habían comenzado a ocupar espacios públicos, la dictadura de Franco se empeñó en conducirlas de nuevo al redil doméstico, en extirparles afanes igualitarios y en convertirlas en las procreadoras que la patria necesitaba después de tanta sangría.

La suma sacerdotisa de aquella hermandad de madres abnegadas y esposas sumisas fue Pilar Primo de Rivera, hermana de José Antonio, el fundador de la Falange. El instrumento fue la Sección Femenina, creada dos años antes para absorber las ansias de las simpatizantes que no eran admitidas en la Falange por razón de su sexo.
A lo que fue la Sección Femenina está dedicada la exposición Mujeres de azul, organizada por el Centro de la Memoria Histórica del Ministerio de Cultura. A lo que significó para miles de mujeres, marcadas por mensajes que las invitaban a despreciarse a sí mismas, tal vez habría que dedicar un simposio de psicoanalistas. "No hay que ser una niña empachada de libros que no sabe hablar de otra cosa... no hay que ser una intelectual", aconsejaba Pilar Primo de Rivera. "No tomes el deporte como pretexto para llevar trajes escandalosos", advertían en el curso de economía doméstica. "Disimula tu presencia física en el trabajo. Seamos hormiguitas graciosas y amables", aleccionaba, de nuevo, la fundadora.
Al comisario de la exposición, Moncho Alpuente, le interesó contar "la historia de los muertos en vida". "La memoria histórica se ha concentrado en la guerra y es lógico, pero la posguerra fue larguísima y dura, empieza y acaba con fusilamientos", indica. Las mujeres fueron muertas en vida, aunque algunas recuerdan sus experiencias de la Sección Femenina casi como liberadoras. "Era una manera de viajar y conocer a otra gente", expone Alpuente. Las dirigentes, contrariamente a lo que preconizaban para las demás, eran solteras y ocupaban un espacio público. "Para algunas, las instructoras de Falange, eran el símbolo de la liberación de la mujer", dice en sus memorias la escritora Carmen Alcalde, citada en la muestra por la historiadora María Antonia Fernández.
Entre 1937 y 1977, tres millones de mujeres de entre 17 y 35 años hicieron el servicio social, una suerte de mili femenina que suministraba mano de obra gratuita en hospitales, comedores y otras instituciones sociosanitarias. La labor de la Sección Femenina tuvo algún efecto positivo. Desterró malos hábitos higiénicos que causaban enfermedades y extendió la práctica del deporte entre las mujeres, con las limitaciones debidas al recato: se inventaron los pololos, se apartaron de la exaltación al cuerpo de sus colegas nazis que incluían desnudos naturalistas y se prohibió el remo, la lucha y el fútbol.
La exposición, que se puede visitar en la sala Santo Domingo de la Cruz, en Salamanca, hasta el 28 de junio, retrata la labor de la organización en distintos campos (sanidad, educación, campañas, comedores, actos políticos, cultura, coros y danzas, deportes y vida rural) a través de 200 imágenes, trajes regionales, insignias, trabajos escolares -hay una labor en punto de cruz dedicada al entonces ministro franquista Manuel Fraga Iribarne-, abanicos, carteles, un documental y la película Ronda española, dirigida por Ladislao Vajda en los cincuenta. La mayoría de los fondos proceden del Archivo General de la Administración, de Alcalá de Henares, donde se depositó el material tras la desaparición en 1977 de la Sección Femenina que, para entonces, se había convertido en un brontosaurio muy alejado de la poderosa maquinaria que llegó a contar con 600.000 afiliadas. Había sido la encargada, en palabras de la historiadora Inmaculada de la Fuente, de "recuperar la antigua feminidad". A la altura de 1977, el modelo en boga tenía más similitudes con las republicanas.Se inventaron los pololos para que la práctica deportiva fuese recatada

La mujer ideal de Pilar Primo de Rivera

- "Gracias a Falange, las mujeres van a ser más limpias, los niños más sanos, los pueblos más alegres y las casas más claras".
- "Todos los días deberíamos de dar gracias a Dios por habernos privado a la mayoría de las mujeres del don de la palabra, porque si lo tuviéramos, quién sabe si caeríamos en la vanidad de exhibirlo en las plazas".
- "Las mujeres nunca descubren nada; les falta el talento creador reservado por Dios para inteligencias varoniles".
"La vida de toda mujer, a pesar de cuanto ella quiera simular -o disimular-no es más que un eterno deseo de encontrar a quien someterse".
in http://elpais.com/diario/2009/05/10/cultura/1241906403_850215.html