EEUU: Expertos encomian esfuerzos por despenalizar actos cometidos por desamparados
23 de abril, 2012 - Tres expertos de derechos humanos de la ONU dieron la bienvenida a un informe publicado por el gobierno de Estados Unido que condena la criminalización de los actos de personas sin hogar y que reconoce que esa medida puede violar sus garantías fundamentales.
Los relatores especiales sobre la extrema pobreza, vivienda, agua y saneamiento, afirmaron hoy en un comunicado conjunto que el estudio del Consejo Interinstitucional sobre Personas sin Hogar y el Departamento de Justicia puede generar una diferencia tangible en la vida de cientos de miles de desamparados en ese país.
Los expertos subrayaron que la penalización de actos de la vida como dormir, comer, hacer necesidades fisiológicas y acciones de higiene personal, así como ejercer la mendicidad en los espacios públicos, puede violar las leyes internacionales de derechos humanos.
En los últimos años Estados Unidos ha visto la proliferación de medidas de ese tipo que han dido adoptadas por las autoridades locales en sus intentos por difundir un enfoque de tolerancia cero a los desamparados y reducir la visibilidad de esas personas en sus comunidades.
Los relatores instaron tanto al gobierno federal como a las autoridades estatales a tomar las medidas adicionales necesarias para derogar esas leyes y reglamentos y a aprovechar los recursos disponibles para convertir en realidad las alternativas constructivas propuestas por el informe.
Según la ONG estadounidense Coalición Nacional para las Personas Sin Hogar, cada año 3.5 millones de estadounidenses pierden sus viviendas y que cada noche unas 730.000 personas utilizan los albergues de la red de apoyo del Estado para los desamparados.
Los expertos subrayaron que la penalización de actos de la vida como dormir, comer, hacer necesidades fisiológicas y acciones de higiene personal, así como ejercer la mendicidad en los espacios públicos, puede violar las leyes internacionales de derechos humanos.
En los últimos años Estados Unidos ha visto la proliferación de medidas de ese tipo que han dido adoptadas por las autoridades locales en sus intentos por difundir un enfoque de tolerancia cero a los desamparados y reducir la visibilidad de esas personas en sus comunidades.
Los relatores instaron tanto al gobierno federal como a las autoridades estatales a tomar las medidas adicionales necesarias para derogar esas leyes y reglamentos y a aprovechar los recursos disponibles para convertir en realidad las alternativas constructivas propuestas por el informe.
Según la ONG estadounidense Coalición Nacional para las Personas Sin Hogar, cada año 3.5 millones de estadounidenses pierden sus viviendas y que cada noche unas 730.000 personas utilizan los albergues de la red de apoyo del Estado para los desamparados.
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